Margarita Zavala renunció a la contienda por la Presidencia de la República y se convirtió en tendencia conversacional en las redes sociales y aunque para el proceso electoral no represente gran cambio en estricto sentido; su decisión le ha generado un gran capital político que en términos de comunicación puede ser aprovechado.
En Twitter el tema encabezó las tendencias e incluso logró colocar en la conversación hashtags relacionados como #MargaritaEnTercerGrado, “Calderón” y “Lástima Margarita” dentro del tema de conversación a pesar de haber actividades comúnmente populares como la final de la Copa de la UEFA.
Lo que sigue para el equipo de Margarita será administrar este proceso para capitalizar todos los positivos posibles y posicionarla en un buen lugar si lo que ella desea es mantenerse en la política, las posibilidades reales para ella podrían beneficiarle en el largo plazo pues a pesar de que los números que traía consigo (según la última encuesta de Consulta Mitofsky) no eran de peso como para influir en los resultado, la decisión sí le ha dado la posibilidad de colocarse en un muy buen lugar moral para generar algo que participando en la contienda nunca ocurrió.
La recomposición de la estrategia deberá contemplar estar vigilantes de conversación y medir la reputación y presencia pero hay que ponderar un tiempo necesario para calcular los cambios generados por esta decisión y retomar el rumbo colocando la mira en ambiciones futuras, si es que estas existen.
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